Entre los sabores más tradicionales para el flan, destaca el limón y la canela. Anímate y prepara este delicioso flan de limón y canela. Toma nota.
El flan de limón y canela es muy sencillo de hacer y resulta un postre casero que recuerda la casa familiar, aquellas comidas con los abuelos, los primos, los tíos y quienes quisiesen acercarse a compartir sabores e historias. A partir de la receta base, esto es, huevos, leche y azúcar, se le puede añadir cualquier ingrediente que sirva para perfumar y darle un toque distinto al flan de toda la vida.
La canela, por ejemplo, es una especia que aromatiza platos salados y dulces, muy apreciada en las cocinas de todo el mundo. Pero es que no es solo su sabor, sino que también tiene propiedades medicinales muy interesantes: ayuda a reducir la glucosa en sangre, el colesterol y los triglicéridos, es antioxidante y aumenta la sensibilidad a la insulina.
El limón es un tesoro: no solamente tiene mucha vitamina C, sino que elimina toxinas y constituye un verdadero bactericida natural. Sirve para aderezar, para elaborar licores y dulces y para cocinar en general. Refuerza el sistema inmunológico, mantiene el pH del cuerpo (y permite la alcalinización del organismo) y desintoxica porque estimula el hígado.
Ingredientes:
- 500 ml de leche
- 4 huevos grandes
- 125 gramos de azúcar + 150 gramos adicionales
- La piel de un limón
- 1 rama de canela
- 6 cucharadas de agua
Cómo preparar un flan de limón y canela:
- El primer paso es aromatizar la leche: en un cazo poner la leche junto con la piel de limón y la rama de canela y ponerla al fuego.
- En lo que empiece a hervir, retirar del fuego y tapar. Dejar que se enfríe.
- Preparar el caramelo: en otro cazo poner el azúcar junto con 6 cucharadas de agua, dejar que se derrita y remover.
- Verter el caramelo en un molde, que cubra el fondo y las paredes. Reservar.
- Cuando la leche esté fría, retirar la piel de limón y la rama de canela.
- En un bol batir los huevos con 125 gramos de azúcar e incorporar poco a poco la leche aromatizada.
- Verter la mezcla de leche y huevo en el molde con el caramelo. Poner el molde dentro de un recipiente con agua para cocinarlo al baño maría.
- Llevar al horno precalentado a 180° C, con calor arriba y abajo, durante 50 minutos.
- Cuando esté bien cuajado, sacar del horno y dejar que se enfríe.
Deja el flan de limón y canela de un día para otro, se desmolda más fácil y el sabor está más concentrado. Prepara este postre entrañable y deleita a tu familia con un sabor tradicional